El cabaret de los hombres perdidos

Teatro musical no convencional, esto quiere decir que lo que nos vamos a encontrar en El cabaret de los hombres perdidos es algo muy distinto, ya sea desde las letras de sus canciones, la melodía y sobre todo las actuaciones, a lo que solemos ver en cualquier obra, especialmente a las adaptadas de Broadway. 

Al igual que el cine francés, en el teatro de aquél país hay una particularidad desde las temáticas que se desarrollan y también el humor “negro” que utiliza que lo hace diferente, único. En el caso de El cabaret… nos vamos a situar en una de las partes más oscuras de cualquier gran ciudad (ya que no se nombra una localidad en particular) denominada como la zona roja gay. Un pozo de mala muerte donde ni la muerte misma se suele presentar. Es allí donde llegará Dicky (Esteban Masturini) “escapando” de una paliza. Más precisamente, entrará al bar dónde comenzará a vivir su inevitable Destino (Omar Calicchio), destino al que el Barman (Diego Mariani) tratará de mostrarle que existe una segunda opción, sin brillo ni glamour pero opción al fin y al cabo, la cual a Dicky parece no convencer, como tampoco lo hacía la primera. Sin embargo, el joven deberá tomar su decisión sin mucho tiempo para pensar. La que no tiene estos y ningún tipo de problemas es Lullaby (Roberto Peloni) que acompaña maravillosamente cada acción que transcurre sin saber realmente porque lo hace.
El cabaret de los hombres perdidos juega con ese momento en que uno elige sus opciones en la vida, momentos cruciales que nos pueden cambiar completamente, donde lo que más brilla puede ser oro, pero generalmente viene acompañado de otros condimentos a los que si uno no sabe identificar como perjudiciales lo pueden llevar a un vacío existencial total. 

Dirigida por Lía Jelin y acompañado permanentemente con la música a un pasito del escenario por Gaby Goldman, El cabaret de los hombres perdidos se convierte en una de las obras teatrales que realmente dan placer a los sentidos. 

Con nosotros hablaron sobre el espectáculo Esteban Masturini y Roberto Peloni que comenzaban respondiendo si este es realmente el papel más jugado y difícil que les tocó interpretar.   

Todos los Lunes y Martes a las 20.30 hs en el Molière Teatro Concert.